Barcelona, 16 de marzo de 2022.- El uso de la mascarilla y las restricciones causadas por la COVID-19 ha aumentado un 20% el número de primeras consultas por problemas en el desarrollo del habla de los niños, según han podido constatar los pediatras y logopedas de HM Hospitales. Por otra parte, se ha observado también un incremento del 50% del número de casos de disfonía entre los adultos que utilizan la voz como herramienta de trabajo. Se trata de trastornos que no resultan graves y pueden reconducirse, pero requieren terapia y el apoyo de los especialistas para evitar complicaciones mayores.
Esta es una de las consecuencias insospechadas de la pandemia y que ha sido detectada en el seno del Grupo gracias a la labor de vigilancia y observación que se hace desde los servicios de Pediatría y Logopedia. Del mismo modo, el trabajo multidisciplinar y de forma coordinada que se realiza en HM Hospitales ha permitido la detección precoz de esta realidad. Además, al hacer pública esta información se persigue que los ciudadanos, que puedan detectar estos problemas en el desarrollo del habla en los más pequeños o el aumento de la disfonía en los adultos, puedan acudir a los especialistas para revertir la situación.
Este incremento de pacientes se ha producido de manera progresiva desde mayo de 2020. La Dra. Sita Pastor, del Servicio de Logopedia y Terapia miofuncional del Hospital HM Nens de Barcelona, explica que “las dificultades que estamos observando en el desarrollo del habla de los niños es una consecuencia directa de las especiales circunstancias que nos ha obligado a vivir la pandemia. El uso de la mascarilla está impidiendo que los pequeños que se encuentran inmersos en pleno proceso evolutivo del habla puedan imitar los movimientos de los labios y los sonidos que escuchan, algo que resulta fundamental a la hora de construir el lenguaje”.
Sin embargo, la mascarilla no es la única causa de esta problemática. También tiene mucho que ver la falta de socialización. La responsable del Servicio de Logopedia del Hospital Universitario HM Torrelodones, Mónica Navarro, afirma que “la menor interacción con otros niños y adultos ajenos a la burbuja de convivencia ha reducido notablemente la presión social, es decir, la necesidad de hablar y comunicarse”.
La Dra. Pastor señala que “nos estamos encontrando con problemas en el área del lenguaje y la expresión como la dislalia –dificultades de pronunciación-, la construcción de palabras y la creación de oraciones, lo que afecta directamente a la lectoescritura, dificultando la comprensión lectora”.
La mayoría de los niños que acuden a la consulta del especialista en busca de diagnóstico y apoyo tienen entre dos y cinco años, lo que para la Dra. Pastor “es lógico porque son los que cuando empezó la pandemia se encontraban en pleno proceso evolutivo del habla, que finaliza a los 4 años”.
Profesionales con trastornos en la voz
Los niños no son los únicos que se están viendo afectados por el uso de la mascarilla, pues también se ha observado un incremento del número de adultos que acuden al especialista por sufrir complicaciones a la hora de hablar. En este sentido, se ha experimentado alrededor de un 50% más de casos de disfonía –la pérdida del timbre habitual debido a un trastorno funcional u orgánico de la laringe- entre los profesionales que utilizan la voz como herramienta de trabajo como profesores, monitores, teleoperadores, recepcionistas, etc. Las principales causas de esta irregularidad son nódulos o pólipos, que deben tratarse adecuadamente para evitar posteriores complicaciones.
Mónica Navarro indica que es “un trastorno que repercute mucho en el día a día de las personas que lo sufren, pues comporta una notable incapacidad. De hecho, la mayoría se ven obligadas a coger la baja laboral”.
Tanto en el caso de los niños como en el de los adultos, los problemas derivados del uso de la mascarilla no revisten gravedad y pueden solucionarse con el apoyo del logopeda y la realización de la terapia adecuada. La duración del tratamiento depende del paciente y de tipo de problema que se presenta, por lo que adquiere mucha importancia el recibir una atención personalizada.
NP LAS MASCARILLAS AUMENTAN LAS CONSULTAS POR PROBLEMAS DE HABLA